Lesiones de rodilla y muslo

Tendinitis de tendón rotuliano

La inflamación del tendón produce dolor por debajo o  por encima de la rótula, por la cara anterior, al bajar o subir escaleras, correr o hacer una utilización excesiva del músculo cuádriceps. Tanto en ésta como en todas las tendinitis, la utilización de frío después de hacer ejercicio como la rebaja de entrenamiento y de esfuerzo de la zona afectada son fundamentales.

Tendinitis de pata de ganso

Al igual que en la lesión anterior, el dolor puede llagar a dejarnos sin hacer nuestro deporte o actividad deportiva favorita. El dolor en este caso se produce en la cara interna de la rodilla, justo por debajo de la zona de flexión de la articulación.

Tendinitis de isquiotibiales

El dolor en este tipo de tendinitis se produce en la zona interna de la rodilla, por encima de la zona de flexión, en la zona externa; esta es la zona mas habitual, justo por encima de la cabeza del peroné y en la zona glútea, en el isquión.

Meniscopatias

La rotura del menisco (se rompe más el menisco interno que el externo) se produce o por una flexión exageradamente rápida de la rodilla o por una rotación de ésta con el pie apoyado en el suelo.  Antes de nada hay que hacer un diagnóstico diferencial para ver si existen lesiones añadidas.

También puede aparecer por causas degenerativas (artrosis),  traumatismos, y por una mala alineación fémur, tibia y rodilla vara o rodilla valga.

La persona experimenta dolores en el interior de la rodilla así como dolor agudo al bajar y subir escaleras, y puede llegar a sufrir bloqueos de la articulación y no poder moverla. La persona tiene la sensación de que la rodilla le falla y se queda sin fuerzas. Suele ser una lesión que acaba siempre con una intervención quirúrgica.

Esguince de ligamentos laterales

Este tipo de esguince de ligamentos se produce al girar la parte inferior de la rodilla sobre la superior y también  al producirse la separación de los dos huesos de la articulación por un traumatismo en la zona interna o externa de la articulación de la rodilla. A veces la lesión se complica con la rotura de esos ligamentos, de los ligamentos cruzados y de uno de los dos meniscos (lesión de la triada).

Esguince de ligamentos cruzados

La causa de la lesión es la anteriorización del fémur sobre la tibia o al revés. La persona tiene la sensación de que la pierna no le sujeta y que se le va hacia delante en caso de ligamento cruzado anterior o se le dobla hacia atrás en caso de ligamento cruzado posterior. El tratamiento conservador de este tipos de esguinces es la potenciación de toda la  masa muscular que recubre la rodilla para que los tendones hagan la función de los ligamentos.

Rotura parcial o total de ligamentos

En el caso de la rotura total de los ligamentos, la persona tiene una sensación de inestabilidad de la rodilla ante cualquier movimiento complejo, de rotación sobre esa rodilla y de frenada y aceleración. La única solución es la quirúrgica.

Condromalacia rotuliana

Esta lesión se produce por una mala alineación de la rótula en su articulación con el fémur. Esto produce que el cartílago articular de la rótula choque contra el hueso y se inflame y al final acabe produciendo una artrosis degenerativa.

La persona suele declarar un dolor intenso al principio de la lesión en la zona lateral, la mas externa, de la rótula después de hacer ejercicio, que según la lesión se va haciendo más crónica nos impide hacer la actividad física que estábamos disfrutando. En un grado leve de la lesión, con un tratamiento conservador, ejercicio para equilibrar fuerzas musculares y potenciación de músculos de la cadera, la persona puede volver a su práctica deportiva habitual.

Roturas de fibras musculares

Los músculos que mas pueden lesionarse de la parte inferior del cuerpo son los gemelos, dentro de estos el interno en su parte inferior, el vasto externo del Cuádriceps, y los Isquiotibiales, el Bíceps Femoral sobretodo.

Osteopatía de pubis

Lesión típica de deportes donde la fuerza muscular de la parte superior del torso esta en claro desequilibrio con el grupo de los músculos aductores del muslo. Este desequilibrio produce dolor en las primeras fases de la lesión, después de hacer ejercicio en la zona púbica, que se puede extender a toda la zona interna del muslo. Si la lesión sigue su curso, la persona empezará a tener dolor al toser, hacer abdominales, correr, sprintar, levantarse de la cama y al final no podrá hacer su actividad deportiva. Tendrá que pasar por cirugía si la lesión no se coge a tiempo.