Se denomina síndrome de aductores, o lesión de aductores, a todo tipo de dolor o de síntomas en la zona inguinal y abdominal, descartados la hernia inguinal, problemas degenerativos como artrosis y artritis y los dolores referidos de las zonas adyacentes, como la zona lumbar, que nos impidan hacer nuestro deporte o vida habitual.

Los músculos de la parte interna del muslo del miembro inferior son los aductores. Son tres, Mayor, Mediano y Menor a los que habría que añadir dos músculos mas que por originarse en la misma zona tienen también esta función que son el Pectíneo, y Recto Interno. Hay que recordar que estos músculos también intervienen en la flexión del muslo, por lo que su lesión también puede deberse a movimientos de repetición en la carrera.

Aductor

Causas más probables de la lesión de aductor

  • Sobrecarga en músculos aductores por sobreentrenamiento, en terrenos resbaladizos, cross, carrera alpina o por movimientos laterales, como pasa en el tenis, paddel, baloncesto, rugby….
  • Excesiva repetición de la zancada forzada.
  • Entrenos de cuestas y escaleras.
  • Distensión por apertura brusca del miembro inferior.
  • Roturas de fibras.
  • Descompensación entre el grupo muscular de los aductores y rectos del abdomen.
  • Cambios brusco de dirección.
  • Bloqueo articular del sacro o de los huesos coxales.
  • Pierna corta o larga anatómica.
  • Descompesación de cadenas musculares.

Las consecuencias  serán  dolor en la zona inguinal, dependiendo del tipo de lesión, agudo e invalidante ( en lesiones como roturas de fibras, distensión) o de forma crónica ( como en la osteopatía de pubis, tendinitis de aductores, descompensación de grupos musculares o bloqueo articular).

  • Tendinitis del grupo muscular de los aductores
  • Osteopatía de pubis, producida por la descompensación de aductores y rectos del abdomen

No hay que olvidar que los aductores son músculos delicados, que se tienen que empezar a tratar en el principio de la lesión con medidas conservadoras, así evitaremos una lesión de larga duración, tediosa, y de tratamiento largo.

Diagnóstico en la lesión de aductor

El diagnóstico diferencial se realizará con lesiones degenerativas (artritis, artrosis, choque femoroacetabular), hernia inguinal, infección ganglionar, puntos gatillo de psoas, recto del abdomen cuadrado lumbar aductores y cuádriceps, patología del nervio pudendo, dismetría de miembro inferior…

Tratamiento lesión del aductor

El tratamiento manual a seguir será el siguiente una vez inspeccionado, palpado, y realizado los rangos de movimiento y el diagnóstico:

  • Masaje terapéutico de descarga de la musculatura aductora de forma suave y específica de los músculos o músculo que este lesionado, sin necesidad de ser demasiado profundo ni doloroso para el paciente.
  • Estiramientos analíticos pasivos de los tres aductores principales y de la batería adyacente.
  • Manipulaciones o movilizaciones de lo iliacos en anterioridad y posterioridad.
  • Manipulaciones o movilizaciones de sacro.
  • Decoaptación de las ramas púbicas, si el bloqueo pélvico es el origen de  esta lesión.
  • Medición de las extremidades inferiores para eliminar las falsas piernas cortas o largas.
  • Tratamiento de las cadenas miofasciales que afectan a la zona inguinal si existe alguna lesión o acortamiento de alguna de ellas.
  • Técnicas neuromusculares para la articulación coxofemoral.
  • Movilizaciones articulares intrínsecas para la articulacón coxofemoral.
  • Masaje transverso profundo tipo Ciryax en el caso de tendinitis.
  • En el caso de la existencia de una dismetría del miembro inferior, estudio de la capacidad lesiva de esta dismetría.
  • El estudio de la pisada y si fuera necesario la colocación de plantillas para eliminar ese origen de lesión.
  • Realizar ejercicios de fuerza para equilibrar todas las cadenas y baterías musculares que afectan  a la zona inguinal (así evitaremos la tan temida osteopatía de pubis y otro tipo de lesiones de la zona coxal y sacra que tendrán como consecuencia lesiones distales viscerales, cervicales…).
  • Regreso progresivo al entrenamiento y a la competición deportiva con ejercicios específicos de la zona para fortalecer sin  olvidarse de un buen calentamiento antes del ejercicio y de unos buena batería de  estiramientos analíticos después del ejercicio.